Todo esto es una pena. Dan Rather y la CBS han reconocido por fin que "han sido engañados" en el caso del reportaje preparado y emitido en el programa "60 minutes" sobre el trato especial recibido por Bush durante su servicio militar en Tejas, en tiempos de la guerra de Vietnam. Una de las pruebas consistía en un texto escrito a máquina. El caso es que (además de otros pormenores) unos expertos han hecho ver que ese texto ha sido escrito en un computer, porque -entre otras cosas- en las máquinas de escribir de 1973 no había o era muy rara la posibilidad de escribir "187th" con la th como superíndice minúsculo. Este es el curioso e interesante documento que permite observar el manejo en cuestión:
La cuestión es muy rica y compleja de matices, y los puntos de vista y la acusaciones entre las partes implicadas chocan entre sí como Kerry y Bush. No entraré en detalles, porque sería muy largo, y porque este "affaire" está profesional y políticamente vivo y hay muchas voces hablando al mismo tiempo. Qusiera solo destacar aquí dos cosas.
Una, que sigue llamando la atención observar cómo Dan Rather -cerradas todas las vias de retroceso manteniendo lo dicho- termina por reconocer públicamente lo que ya era vox populi desde hace bastantes días. Y para hacerlo, dice que él y la CBS "han sido engañados", pero no dice nada acerca del engaño que sus espectadores han sufrido al aceptar como bueno lo que Dan Rather les ha dicho con gran aplomo. En todo caso se suma a sus espectadores en la situación de "todos engañados". [Aunque sea un sofisma de tipo "mal de muchos, consuelo de todos" (o de tontos), el caso es que suele funcionar bastante bien en esta operación de "autopresentarse públicamente como otro victimizado" de la que tanto podría decirnos René Girard.]
Eso, en cualquier caso, no es hacer pie y tomar impulso en lo que siempre parece que fué la firme peana del periodismo audiovisual con Walter Cronkite, antecesor de Rather en la CBS. Es decir, atenerse por principio a la realidad y buscar la verdad de las cosas hasta donde fuera posible, contrastar las fuentes, oir todas las campanas, siempre abierto a rectificar, y luego limitarse a decir honradamente lo que se tiene, tal y como se tiene: si se piensa que lo que se tiene es verdad, darlo como verdad; si se ve como opinión, darlo como opinión; si certeza, como certeza; si duda como duda; si prejuicio, como prejuicio, etc.
Resulta muy incómodo comprobar que entre las grandes figuras hay gente empeñada en dar como verdadero algo que sólo es, o puede resultar ante los demás -por decir algo suave- verosímil. Y resulta aún más inconfortable observar que alguien hace interesadamente verosímil algo que cuando menos y para él mismo es dudoso, aunque "le venga muy bien" para sus planes argumentativos partisanos, con independencia de la búsqueda de la verdad y el bien común. Da la impresión, en los últimos tiempos, de que algunos profesionales están -sobre todo- empeñados en tener razón cada vez que abren la boca. Y esto es peligroso, porque el querer tener siempre razón, por encima de todo, es una actitud que suele darse especialmente entre los locos.
Dos: no está de más destacar que este asunto ha sido sobre todo sacado a la luz por escritores y lectores de blogs. Cierto que sin apoyos y difusión, no hubieran podido llegar muy lejos. Pero el caso ayuda a meditar en la tendencia a la arteriosclerosis (el endurecimiento de las arterias que llevan sangre fresca a los órganos vitales) de los medios tradicionales. Son ya demasiados los casos de patente pérdida de credibilidad o fiabilidad en buena parte de la prensa, radio y televisión de altos vuelos (NYT y Jason Blair, etc.), en parte por sus condescendientes relaciones con el poder (el montaje de la saga de Jessica Lynch, etc.) Quizá la integración multimediática y -de paso- la densa interacción y consiguiente progresiva integración (¿otro modo de "embedding"?) con intereses del tecnosistema político-empresarial ha hecho que el panorama y el estatuto de los medios de comunicación esté cambiando más rápidamente de lo que parece.
No es lo mismo tener como prioridad la veracidad que la rentabilidad. No es lo mismo servir al público que servirse del público. No es lo mismo que sea un redactor-jefe o un ejecutivo de publicidad o de gerencia quien tenga la última palabra sobre lo que llega al público. Además, hoy en día la agilidad unida a la credibilidad se tiende a concentrar (es sólo una tendencia: hay múltiples excepciones y matices en esto) en el trabajo de muchos pequeños y flexibles grupos profesionales independientes en internet. También con los patentes peligros de todos bien conocidos, por supuesto. Y con la evidente falta de medios que, sin embargo, tienen los "mainstream media". Cosas no son ahora del caso.
Caen más ídolos del periodismo: cabezas de oro, torsos de bronce, piernas de hierro, pies de barro.
>> La Opinión Digital (21 de septiembre de 2004): CBS reconoce que le engañaron. >> Time (September 27, 2004): Red Truth, Blue Truth. The CBS flap is one more sign of the ferocious struggle between political partisans to see the world their way. >> Time: The Bloggers. How to knock down a story. >> Time: A Blogger's Creed. A member of the blogging class tells why they deserve your thanks (By Andrew Sullivan): "Take the CBS document story. The clues to the alleged forgery were not discovered by the bloggers themselves—but by their readers. While CBS had a handful of experts look at the dubious memos (and failed to heed their concerns), the blogosphere enlisted hundreds within hours. Debates ensued, with different blogs challenging others over various abstruse points. Yes, some of this was fueled by raw partisanship and bias. The blogosphere is not morally pure. But the result was that the facts were flushed out more effectively and swiftly than the old media could ever have hoped. The collective mind also turns out to be a corrective one." >> The Wall Street Journal (September 21, 2004; Page A22) : "The big news in yesterday's mea culpa by CBS News isn't that the network was "misled" about "documents whose authenticity is in doubt," as it was finally forced to concede. The story is the admission that the source Dan Rather trusted with CBS's reputation was none other than Bill Burkett, a noted antagonist of President Bush." >> El Periódico: "(...) ha sido una verdadera puñalada por la espalda para quienes durante años y años han admirado, respetado y creído a Dan Rather, el eje de las CBS Evening News y el programa 60 Minutes, que la respetada cadena de televisión haya reconocido haber difundido datos de dudosa credibilidad sobre el presidente Bush. Ha sido una sacudida descubrir que incluso él, el gran Rather, ha caído en el error de apresurarse y divulgar una información falsa y poco contrastada." >> BBC: "The White House said the affair raised questions about connections between CBS' source and Democrat John Kerry's presidential campaign. The service records of both Mr Bush and Mr Kerry, a Vietnam veteran, have become a major issue in the US presidential campaign. Correspondents say the revelation has been a major blow to the credibility of CBS and Mr Rather in particular." >> Mediapost: Will 'Rathergate' Cost CBS Ad Dollars? : "CBS News - once the citadel of TV Network news - should be the last place in the world of journalism to take a dollar-and-cents point of view. But in light of CBS' own headline-making news -- concerning the veracity of the documents surrounding President Bush's stint in the Air National Guard -- questions need to be asked; inquiries need to surface that the press wouldn't typically delve into this time of year. The question is about business: Will CBS' error cost it advertising revenue?" >> The Detroit News (September 22, 2004) "New media era dawns in U.S. Increase in talk shows, Web sites changes way Americans form opinions, make decisions": (...) "hundreds of new outlets offer Americans distinctive approaches to stories, and many people have gravitated to the outlets that they believe most reflect their own views. At the same time, increasing numbers of people are relying on new forms of media such as Web logs and Internet sites to supplement and even replace newspapers, magazines, radio stations, and both broadcast networks and cable TV channels." >> Mediapost (September 23, 2004): Since the September 8 episode of "60 Minutes" regarding President Bush's National Guard service, coverage of the story quickly went from the validity of the claim to the claim of validity and finally to the way both are being determined. Within a matter of a few days, blogs began peeling back the onionskin of the story to uncover what can ostensibly be called "the truth." This week, the industry is rife with stories about "Rathergate." But the phenomenon that is infiltrating the culture more than anything else is the blog.(...) A number of blogs have gained media attention for taking on the role of fact challenger and fact checker, trying to prove the unreliability of documents aired by CBS' "60 Minutes" that alleged President Bush got preferential treatment during his Texas National Guard service. This is simply one more sign of the growing impact blogs have on media and political culture. >> I Want Media (September 23, 2004): FCC indecency fine and "Rathergate". Question: Which incident will have the biggest repercussions? Answer: Jon Friedman, media editor, CBSMarketWatch: "The controversy over CBS' reporting about President Bush's National Guard service will have a bigger impact than the news of the FCC fine. The reporting flap may impact how the viewing public regards CBS during a Presidential campaign. CBS must fully and openly explain to the world what went wrong -- and hold nothing back. Over the years, news organizations ranging from NBC and CNN to the New York Times and USA Today have moved on after their debacles. America is a forgiving nation -- except when it comes to a cover-up." >> I Want Media (September 27, 2004): Blogs & "Rathergate" |
Juanjo, que sorpresa!
Andaba con el impacto de los blogs sí vs. auto/megapetulancia de los blogueros y
zas! noblejas on line... me encanta la foto de la escalera,
tengo que hacerme una para estos e-encuentros
un fuerte abrazo
Publicado por: daniel martí pellón | 22 septiembre 2004 en 11:20 a.m.