Mientras el periódico oficial chino on-line, "Pueblo en Línea" anuncia con gran contento y satisfacción, hoy mismo, que El número de suscriptores a la Internet de China llega a 103 millones, resulta que el blog Wang Yi's Microphone, como puede comprobarse yendo a su dirección ( http://zhivago.tianyablog.com ), acaba de ser cerrado sin contemplaciones por la censura china. Así lo corrobora Canton Daily Ledger, refiriéndose en concreto a las autoridades de la provincia de Hainan, donde se encuentra el servidor y la compañía Tianya, que aloja el blog de Wang Yi.
El gobierno comunista chino promociona oficialmente el uso de Internet con fines educativos y mercantiles, pero bloquea los matariales que presentan aspectos de pornográficos o subversivos. Ser subversivo, en concreto y entre otras variadas cosas, supone utilizar -por ejemplo- la palabra "democracia". Algo de eso ya se dijo en Scriptor a propósito del encarcelamiento del periodista Shi Tao, y también a propósito del "dia de Internet".
Wang Yi's Microphone, había quedado tercero entre los seleccionados para los premios BOB, organizados por la Deutsche Welle, dentro de la categoría especial "Reporteros sin fronteras".
Wang Yi, que es un profesor en la Universidad de Chengdu, ha publicado recientemente, según informa Journalism.co.uk, su opinión acerca de la campaña de unos campesinos de la provincia de Guangdong, para quitar de su puesto al jefe de un poblado acusado de corrupción.
Junto a las justas condenas occidentales de este enésimo episodio, tampoco está de más saber que son precisamente compañías occidentales las que venden tecnología o adaptan la suya a los requisitos de las autoridades, para poder lograr un control realmente poderoso de toda la red china, la segunda en el mundo, detrás de USA, por el momento.
Sobre el estado reciente de la cuestión, pueden leerse algunos textos como los que siguen a continuación, tomados de China Digital Times, parte del Berkeley China Internet Project, en la Graduate School of Journalism, de la University of California en Berkeley:
• Western companies under fire over media controls in China - AFP
• China and the Internet: change goes both ways - Rebecca MacKinnon
• The future of dissent: hacking Chinese censorship - Giovanni Navarria
• New rules for news Websites - Zhu Shenshen
• Building the Great Firewall of China, With Foreign Help - Tina Rosenberg
• Thanks to corporations, instead of democracy we get Baywatch - George Monbiot
También es recomendable leer el siguiente estracto de lo publicado por Reporteros sin fronteras acerca de Internet en China.
Con 61 internautas encarcelados a fecha 1 de mayo de 2004, China es la mayor cárcel del mundo para los ciberdisidentes. Es también el país en que están más desarrolladas las tecnologías de interceptación de las comunicaciones electrónicas, y de censura de la Red. Además, recientemente las autoridades han decidido apretar aun más su cerrojo sobre la Red, dando así marcha atrás a las escasas conquistas logradas por los internautas, en los últimos años. (...)
Marcha atrás para la libertad de expresión
En febrero de 2004, el poder dictó unas directivas destinadas a prohibir los temas delicados en los foros de discusión de los grandes portales chinos (sohu.com, sina.com, etc). De esta forma se cerró la mayor parte de los espacios de discusión política, y los moderadores (ban zhu) redoblaron sus esfuerzos para censurar los debates. Pocas semanas más tarde, las autoridades decidieron hacer inaccesible la mayoría de los blogs, esos mini-sitios personales que permitían a decenas de miles de chinos publicar sus comentarios sobre la actualidad.(...) Hoy, en China, resulta imposible hablar de política en Internet.
La censura china, ¿cómo funciona eso ?
Desde su origen, la arquitectura de la Red china se concibió para permitir el control de la información. Solo existen cinco backbones ; es decir, cinco puntos por los que pasa todo el tráfico. Cualquiera que sea el proveedor de acceso utilizado por el internauta, sus e-mails y los documentos que descarga transitan necesariamente por esos nudos de conexión.
Después, China ha comprado tecnologías y material puntero en empresas norteamericanas. Cisco Systems vendió varios miles de cursores, a más de 16.000 euros la pieza, para formar la infraestructura de vigilancia del régimen. El material se parametrizó con ayuda de ingenieros de Cisco. Permite leer las informaciones transmitidas por la Red y encontrar las palabras clave "subversivas". La policía dispone de medios para saber quien consulta sitios prohibidos, o envía correos electrónicos "peligrosos".
(...) Según un estudio efectuado por el Berkman Center for Internet & Society, China bloquea varios cientos de miles de sitios. Algunos se bloquean por su dirección IP, otros por el nombre del dominio, pero también han aparecido métodos más sutiles. Ahora Pekín practica el desvío de DNS (DNS highjacking), un método que, cuando un internauta intenta consultar un sitio prohibido, permite desviarle a otro sitio, o a una dirección inválida. Este tipo de censura resulta difícil de descubrir para el usuario, que piensa que ha marcado una dirección errónea.
Las autoridades también consiguen censurar directamente los buscadores. Para Yahoo ! se trata de una tarea fácil, ya que ha aceptado plegarse a las demandas del gobierno. (...) En el momento presente, una búsqueda del término Falungong en Google, o bien provoca un bloqueo temporal de la conexión del internauta, o no da ningún resultado.
China, la mayor cárcel del mundo para los ciberdisidentes
China detuvo a dos ciberdisidentes, entre mayo de 2003 y mayo de 2004. Otros cuatro salieron en libertad, en el mismo período.
Sin embargo, a fecha 1 de mayo de 2004, 61 personas continúan encarceladas por publicar en Internet textos considerados subversivos. 17 de esos internautas han sido condenados, desde mayo de 2003, a penas que llegan hasta los 14 años de cárcel. Los tribunales han seguido dedicándose a parodias de juicios, mofándose sin vergüenza de los derechos de la defensa. Las voces de algunos intelectuales chinos, como Liu Xiaobo, se han alzado contra la iniquidad de la justicia. Este, entre otras cosas criticó la abusiva utilización del artículo 105 del código penal, que establece penas de cárcel por "subversión", para los ciberdisidentes que se declaran favorables a la democracia.