Se ha producido como un silencio, lleno de estupor y espectativas, tras la publicación del texto completo de la Carta de Benedicto XVI a los obispos.
Conviene leerla: no es larga, ni el lenguaje abrupto. Al contrario, lo que quizá abruma es la breve concisión y claridad con que se dice lo que se dice.
(...) "por circunstancias fortuitas, en los días en que me vino a la mente escribir esta carta, tuve que interpretar y comentar en el Seminario Romano el texto de Ga 5,13-15. Percibí con sorpresa la inmediatez con que estas frases nos hablan del momento actual: «No una libertad para que se aproveche el egoísmo; al contrario, sed esclavos unos de otros por amor. Porque toda la ley se concentra en esta frase: "Amarás al prójimo como a ti mismo". Pero, atención: que si os mordéis y devoráis unos a otros, terminaréis por destruiros mutuamente».
Siempre fui propenso a considerar esta frase como una de las exageraciones retóricas que a menudo se encuentran en San Pablo. Bajo ciertos aspectos puede ser también así.
Pero desgraciadamente este "morder y devorar" existe también hoy en la Iglesia como expresión de una libertad mal interpretada.
¿Sorprende acaso que tampoco nosotros seamos mejores que los Gálatas? Que ¿quizás estemos amenazados por las mismas tentaciones? ¿Que debamos aprender nuevamente el justo uso de la libertad? ¿Y que una y otra vez debamos aprender la prioridad suprema: el amor?" (...)
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Actualización 13 Feb 09: Giovanni Maria Vian, director del Osservatore Romano, publica hoy un breve artículo titulado Come la lettera ai Galati. Entre otras cosas, escribe con explícita referencia a la Curia vaticana:
(...) La lucidità dell'analisi papale non evita questioni aperte e difficili, come la necessità di una attenzione e di una comunicazione più preparate e tempestive in un contesto globale dove l'informazione, onnipresente e sovrabbondante, è di continuo esposta a manipolazioni e a strumentalizzazioni, tra cui le cosiddette fughe di notizie, che si fatica a non definire miserande.
Anche all'interno della Curia romana, organismo storicamente collegiale e che nella Chiesa ha un dovere di esemplarità. (...)
(...) in un mondo dove la fiamma della fede rischia di spegnersi la priorità è proprio condurre gli uomini verso il Dio che ha parlato sul Sinai e si è manifestato in Gesù. Un Dio che rischia di sparire dall'orizzonte umano e che solo la testimonianza di unità dei credenti rende credibile.
Ecco perché sono importanti l'unità della Chiesa cattolica e l'impegno ecumenico, ecco perché ha significato il dialogo tra le religioni. Per questo la grande Chiesa - un termine caro alla tradizione - deve ricercare la pace con tutti.
Per questo i cattolici non devono dilaniarsi [desgarrarse] come i Galati a cui Paolo intorno all'anno 56 scrisse di suo pugno una delle lettere più drammatiche e belle. Come questa di Papa Benedetto.
Nueva Actualización:
Veo que Montse Doval (Internet Política) ha iniciado en Facebook el grupo "Escribe al Papa y hazle llegar tu cariño". Encomiable iniciativa, que es de esperar resulte fecunda.
Pues mira, justo fue lo que pensé, que convenía hacerle llegar la cercanía porque, como tú, me ha parecido una carta llena de amor herido y de desconcierto ante el maltrato recibido.
Publicado por: Montse | 13 marzo 2009 en 12:57 p.m.
Qué bueno ver lo que dices! Como imagino que ya le habrás escrito (yo lo hice ayer, y no ha habido ningún rechazo técnico de ningún servidor de correo), quizá podrías difundir la idea, por si hay gente que también lo ve así de oportuno o necesario. Un cordial saludo, JJ.
Publicado por: JJG Noblejas | 13 marzo 2009 en 01:29 p.m.
He creado un grupo en Facebook y te he mandado invitación. Dejo aquí el enlace del grupo por si alguien quiere unirse.
http://www.facebook.com/home.php#/group.php?gid=56729294899&ref=mf
Mil gracias por el post
Publicado por: Montse | 13 marzo 2009 en 02:15 p.m.
Gracias, Juanjo, por tu aviso. Acabo de escribirle y, por supuesto, le tengo muy presente.
Jaume
Publicado por: Jaume Figa | 13 marzo 2009 en 04:00 p.m.
Brillante post Juanjo. De los mejores que has publicado. Pero lo tenías fácil ;-) El material de origen con el que trabajar es, simplemente, histórico.
Es la carta de las preguntas. Nos interpela constantemente a todos para que tomemos posición, no tanto sobre lo que ha ocurrido sino sobre algo mucho más capital: "Y tú ¿qué? ¿cómo es tu Amor... cómo andas de verdadera caridad?".
De entre todas esas preguntas me ha impresionado muchísimo esta: "¿Qué será de ellos luego?"
Me ha venido a la memoria la parábola del Buen Pastor en el evangelio de Lucas. "Alégrense conmigo, porque encontré la oveja que se me había perdido".
No sabemos -y, de hecho, no debería ni importarnos lo más mínimo- si esa oveja se perdió porque era mala, estaba enferma o era simplemente inútil. El Buen Pastor salió a buscarla porque era "su" oveja, independientemente de cómo estuviera. La obligación-necesidad-compromiso de cuidar a todas y cada una de sus ovejas fue lo que le movió a salir en su busca. Para encontrarla y traerla de nuevo a casa.
Este Papa es un tipo muy grande. Enorme. Y ahora empiezo a entender con mayor precisión lo que nos quería decir en "Deus caritas est". Y empiezo a comprender con mayor precisión cómo fue el dolor en el Huerto de Getsemaní por la dormilera de los que decían (decíamos) que le amaban.
Tras leer esta carta no puedo entrar en matizaciones y puntualizaciones. Es lo que es. O estamos con él, o no lo estamos. O practicamos el Amor o, simplemente, no seremos Iglesia.
Publicado por: Jordi | 13 marzo 2009 en 05:18 p.m.
Muchas gracias por el post. Sabía que aquí encontraría un comentario que merece cuidadosa lectura y análisis (y le pondré enlace en mi blog).
Me he quedado muda al leer la carta y he subrayado algunas cosas. Francamente para que el Papa deba dar explicaciones para “contribuir a la paz en la Iglesia”, en nuestra Iglesia, - y lo diga públicamente - duele. Que el Papa saque lecciones de la situación Dios mío que humildad nos esta enseñando. Que este ´”morder y devorar” exista también hoy en la Iglesia como expresión de una libertad mal entendida” es de una sinceridad inusual y nos invita a repensar y a vivir de verdad el “Amaras a tu prójimo como a ti mismo”. Es una carta que quizás no solo convenga leerla. Creo que todos deberíamos leerla y quizás todos escribirle, dándole muestras de cariño y asegurándole nuestras oraciones, hasta que la casilla (que supongo tendrá capacidad especial) quede abarrotada. Y gracias por las direcciones de correo para escribirle
Publicado por: Ljudmila | 13 marzo 2009 en 09:22 p.m.
Juanjo: muchas gracias por la direccción de Benedicto XVl. Le escribiré. La carta impresiona.
Saludos cordiales.
JJP
Publicado por: José Julio Perlado | 13 marzo 2009 en 09:38 p.m.
Se mire por donde se mire, la carta es impresionante y ha causado general sintonía con Benedicto XVI. Muchas gracias por lo que decís, que es igualmente magnífico (Jordi, imagino que quizá tengas que escribir una canción para tu próximo álbum). He visto que en el grupo de Facebook abierto por Montse Doval hay ahora mismo 126 personas. Imagino que unos habrán escrito al Papa y otros lo harán. Un cordial saludo, JJ
Publicado por: JJG Noblejas | 15 marzo 2009 en 11:20 a.m.
Gracias por el remezón y la invitación de leer la carta de Benedicto XVI. Tenía mis reservas ante este Papa, pues es muy grande, "vuela mucho", y mi mente no da para tanto, pero por lo que ha dado a conocer, en verdad lo siento más cercano a mi, a nosotros, que nosotros mismos.
Recemos por él más que nunca, hasta desfallecer de cansancio
Publicado por: Frank Suárez Minaya | 15 marzo 2009 en 09:44 p.m.
Mmmm... buena idea... la soledad del corredor de fondo. La soledad de la Verdad. La falacia de "la vida depende del color con que se mire".
Tomo nota (y de la buena!)
Publicado por: Jordi | 16 marzo 2009 en 12:08 p.m.
buen tema
Publicado por: fff | 18 marzo 2010 en 03:18 a.m.