Me felicito y felicito a Manuel M. Almeida por la presentación de "EcoPlaneta" como nueva sección de su estupendo y justamente renombrado como blog imprescindible, Mangas Verdes. La ecología, más que el ecologísmo como ideología, necesita un espacio mayor en la blogosfera.
Al mismo tiempo, encuentro que -por una parte- aparece noticia de una campaña también ecológica que hoy comienza, centrada en la protección a los niños desde que son concebidos, que durará hasta el 30 de marzo, con carteles que podrán verse en 1.300 vallas publicitarias de toda España.
Por otra parte, caigo en cuenta de que aquí en Scriptor, sin hacer una sección especial, ha surgido de modo natural dedicar atención creciente a algo que bien podría considerarse "ecología global", en la que se preste atención a los seres humanos, como vivientes desde el embrión, junto a los animales y las plantas, y también junto a otros recursos naturales.
Es éste un asunto, es curioso, en el que no compito demasiado con los medios y los blogs no especializados, de interés general, at large, porque no lo tratan de ordinario. Termina siendo un asunto, es curioso, que incluso resulta a veces visto -sin decirlo, pero hay silencios clamorosos- con cierto reparo: como si hablar de la vida humana en el no-nacido fuera algo privativo -por un lado, claro y sereno- de la Iglesia o -por otro, más bien amargo- del actual gobierno de la nación.
El caso es que hay muchos escritores interesados en el mundo circundante, pero que -en lo relativo a la vida humana- prefieren hablar de las cosas de la vida en la medida en que la gente ya tiene o se le supone, más o menos, pleno uso de razón. Sin prestar demasiada atención al antes (embarazo y primera infancia) o al después (ancianidad) de esa presunta plenitud de uso de razón...
No es que tales colegas hayan sucumbido ante las presiones políticas en torno al aborto o la eutanasia. No pienso que sea eso. Ni que estén lejos de lo que dice la Iglesia católica al respecto, junto a muchas otras voces laicas o de otras creencias. Simplemente, imagino que han decidido trabajar sobre otros asuntos humanos, no necesariamente asociados a la protección ecológica de los humanos en los momentos iniciales y terminales de la vida.
Por eso, entiendo que resulta de interés, sin la sordina con retintín que utiliza el diario El Mundo, o el diario El País, mencionar la campaña promovida por los obispos españoles, que habla de proteger al niño humano ibérico, al menos con el cuidado con que se protege al lince ibérico.
La comparación suena a barbaridad, pero quizá la situación de la política del gobierno español ante los seres humanos no nacidos (libertad para eliminarlos, sin tener que dar explicaciones a nadie) resulta muchísimo más bárbara y bestial.
Así que ya ves, en estas andamos, querido Manuel M. Almeida. Enhorabuena por la sección de Mangas Verdes. Y enhorabuena a los promotores de esta campaña ecológica claramente celtibérica. A veces, con los sordos que no lo son de nacimiento, hay que hablar muy alto, e incluso gritar, para que oigan algo.
NO SOY CATÓLICO, PERO COMO PERSONA ME IDENTIFICO CON LA CAMPAÑA ECOLOGÍA CELTIBERÍCA. DECIR QUE HE TENIDO LA INGRATA SUERTE DE VISUALIZAR, LOS FETOS ABORTADOS. EN ESOS MOMENTOS HE NOTADO COMO SE DESGARRABA MI CORAZON DE DOLOR. QUISE LLORAR, PERO COMO HOMBRE NO LO HICE, (ME ARREPIENTO) PERO DESDE LO MAS PROFUNDO DE MI SER, ABOGO POR EL DERECHO A LA VIDA, A LA OPORTUNIDAD QUE A TODO NACIDO NOS DA LA NATURALEZA. NO SE DESTRUYE UNA VIDA SI SE HA TENIDO LA OPORTUNIDAD DE VER LO QUE YO PUDE VER. COMO AGNOSTICO, DIGO QUE ES UN ASESINATO. PIDO A LAS CONCIENCIAS, QUE RESPETEN LA VIDA, CONCEBIDA Y NO NACIDA, PARA QUE TENGAN LAS MISMAS OPORTUNIDADES QUE CUALQUIER ANIMAL SALVAJE EN SU MEDIO.
RESPETEMOSNOS.
Publicado por: ISIDORO | 16 marzo 2009 en 07:46 p.m.