Por una parte, resulta que -según los listados de las 200 universidades "top"- sólo figura una española, la Universidad de Barcelona, perdida en el puesto número 171.
A pesar del más que probable chovinismo de la encuesta, lo que destaca es el imparable ascenso del modelo elitista anglosajón, aplicado en países asiáticos. Lo cuenta Ángel Villarino desde Pekín:
Aunque la metodología utilizada para este tipo de estudios no está exenta de polémica, parece evidente que el ascenso asiático es una constante. Los expertos lo explican haciendo notar que la inversión de los países orientales no ha parado de crecer en los últimos años, mientras en la Europa continental se ha estancado o incluso está disminuyendo. En el campo de la investigación el resultado es parecido. China, sin ir más lejos, dedicó en 2008 un 1,52% de su PIB a Investigación + Desarrollo, frente al 1,27% de España, uno de los más bajos de la Unión Europea. De hecho, el gigante asiático es ya el cuarto país que más dinero dedica a la investigación, sólo por detrás de Estados Unidos, Japón y Alemania.
(...)
Expertos del sector explican que el nuevo modelo asiático se inspira en la concepción elitista de la educación propia de los países anglosajones, mientras que en naciones como España, Italia e incluso Francia se ha impuesto la opción universal e igualitaria: hacer llegar el conocimiento hasta todos los rincones y clases sociales, sin potenciar “escuelas de élite”. Así, mientras en nuestro país las inversiones educativas han servido para levantar decenas de nuevas facultades en cada comunidad autónoma, en Pekín, Hong Kong, Singapur o Taipei proliferan los centros reservados para los mejores estudiantes y para aquellos que pueden pagar las elevadas tasas.
Por otra parte, conviene insistir en el desbarajuste que introduce en las universidades españolas el otro gran factor, señalado insistentemente por Alejandro Llano, como voz que predica en el desierto: el futuro de las universidades no puede prescindir de sus ideales y valores nativos. Por eso acaba de decir que
(...) Lo grave de su actual crisis consiste en que, dentro de ella misma, sus propios ideales han comenzado a dejar de valorarse. El martilleo del pragmatismo y la superficialidad, característicos de esta “era del vacío”, ya afecta a los tímpanos de quienes habitan la fortaleza largo tiempo asediada.
¿Quién cree hoy entre nosotros en el saber por el saber? Que no son muchos los creyentes —y menos los practicantes— se aprecia, no sólo en la marginación de las humanidades, sino también en la general huida de las carreras teóricas de ciencias: Matemáticas y Físicas, sin ir más lejos. El dogma de la “empleabilidad” (¡horrible palabra!) se impone a la hora de diseñar grados inverosímiles y de nulo valor formativo. En cambio, las carreras acrisoladas durante siglos, a las que se debe gran parte de los más rompedores avances contemporáneos, se consideran erróneamente como decorativas. El furor entusiasta con el que se pretende imitar a las universidades anglosajonas, pasa por alto el secreto de su éxito. Cualquiera de las grandes instituciones internacionales de enseñanza superior dedica lo mejor de sus energías al cultivo de las lenguas clásicas, y a la investigación y transmisión de la ciencia más ininteligible para un ejecutivo convencional.
(...) La España actual necesita perentoriamente que alguien promueva los valores sustantivos de tipo cognoscitivo y ético. Y la universidad está obligada a hacerse cargo de estos decisivos intangibles. La condición imprescindible reside en su propia capacidad de regeneración. Los académicos maduros pueden aportar su experiencia y su solidez intelectual. Pero son las nuevas —y numerosas— promociones de profesores más jóvenes las que han de distanciarse del narcisismo legalista y de la autorreferencialidad gremial, para lanzar proyectos realmente innovadores. Sin olvidar que la universidad imprime carácter y, por lo tanto, que cuantos han pasado por ella siguen siendo universitarios y deben velar por la vitalidad de la institución en la que cual crecieron.
Esperemos que la pretendida extensión utilitaria del saber no dé al traste con el mismo saber.
"Expertos del sector explican que el nuevo modelo asiático se inspira en la concepción elitista de la educación propia de los países anglosajones, mientras que en naciones como España, Italia e incluso Francia se ha impuesto la opción universal e igualitaria: hacer llegar el conocimiento hasta todos los rincones y clases sociales, sin potenciar “escuelas de élite”."
esta es la idea que existe y se practica en Alemania desde, por lo menos, la década del '60 o antes y... las universidades alemanas, en la lista denominada "National honours: most institutions in top 200" (http://www.timeshighereducation.co.uk/story.asp?sectioncode=26&storycode=408560&c=2) está en el puesto... déjame contar... 6, con 11 universidades (Espana no aparece en esta lista),
de manera que no creo que ese sea el problema... es más, creo que el saber universitario sí debería penetrar hacia todos los sectores de la población.
Lo de "igualitario" no alcanzo a entenderlo, pienso, si a eso se refieren que "igualar hacia abajo", bajando el nivel de ensenanza es malo; lo bueno es igualar hacia arriba, levantando el nivel :)
Un consejo: mejoren el nivel de debate en Espana, impulsen a los alumnos a pensar por sí mismos, apaguen los televisores, mejoren las bibliotecas y ya habrán avanzado mucho.
Muchos saludos!
Publicado por: marta salazar | 13 octubre 2009 en 03:58 p.m.
No me gusta el tono condescendiente ('patronizing') del comentario anterior. Yo, antes de nada, pondría muy entre comillas ese ranking: miré un poco por encima los criterios y eran manifestamente mejorables.
Y Alemania -cuyas universidades admiraba mucho- está haciendo una pésima política universitaria. Y se han puesto -como ahora acaba de hacer el ministerio en España- a destacar alguna Universidad -en concreto las dos de Munich, para 'salir en los rankings universitarios, que habitualmente están dominados por Universidades USA, seguidas por las inglesas. En esos, no salen casi Universidades alemanas (ni españolas por supuesto, no digo ya chilenas).
Publicado por: Ángel Ruiz | 14 octubre 2009 en 12:45 p.m.
Hola Ángel! condescendiente con quién?
la mala política que "está haciendo" Alemania... te refieres concretamente a qué?
Saludos y gracias x tu comment!
Publicado por: marta salazar | 14 octubre 2009 en 01:23 p.m.
Tu comentario me parecía condescendiente con España.
La mala política alemana es esta: http://www.magazine-deutschland.de/en/artikel-en/article/article/elite-und-exzellenz.html
El hecho es que en Humanidades están cerrando cátedras sobre conocimientos 'inútiles' desde hace tiempo.
En España acaba de aprobar el gobierno una lista de 15 universidades 'top', que reciben más dinero.
Y todo por estar en las listas.
Publicado por: Ángel Ruiz | 14 octubre 2009 en 04:56 p.m.
Estimados Marta y Ángel, muchas gracias por vuestras precisiones en este educado dialogar sobre asuntos que -como universitarios- cada cual lo cuenta de ordinario con no poca pasión, tantas veces cegadora, según le va en su propia vida y circunstancia. Personalmente, lamento que las Humanidades hayan cedido el paso ante saberes directamente utilitarios. Bien es sabido cómo el viejo Aristóteles definía la carácterística humana como el realizar actividades al margen de la utilidad. En este sentido, la filosofía no es sólo inútil porque no "no es utilizable" para fines extraños a ella misma, sino también porque se trata de un saber "libre", propio de ciudadanos libres, no de funcionarios o esclavos. La filosofía se plantea -y nosotros con ella- las cuestiones básicas y últimas que somos capaces de hacernos. Quitarla de enmedio es poner de lado la trascendencia del hombre. Y quien dice esto de la filosofía "pura", igualmente lo puede decir de la "impura", es decir, la filosofía política, la ética, la poética, etc. Muchas gracias, de veras, por los comentarios. Un cordialísimo saludo, JJ
Publicado por: JJG Noblejas | 14 octubre 2009 en 10:43 p.m.
ah! gracias x el link!
"condescendiente con Espana" = quieres decir que la trato muy bien?
No conozco las universidades espanolas... sólo lo que me han contado algunos estudiantes alemanes y que, alguna vez he escrito en algún blog... algunas veces, en realidad ;)
el link... bueno, es sólo una visión; la verdad es que, desde que comenzó Bolonia todo está en movimiento, para bien o para mal, hay opiniones en todos los sentidos :)
Entre paréntesis, el plan este de la inteligente sra. Schavan (que dejará el gabinete, gracias a Dios!) de la excelencia (una palabra que ni siquiera es muy alemana) es, a mi modo de ver y al modo de ver de otras muchas personas, una tontería.
Se gasta dinero en intentar crear artificialmente universidades que puedan competir con las norteamericanas, pero no se mejora la ensenanza univesitaria en general en esas universidades.
Se le da fondos (porque el programa de la excelencia es un tema económico) a algunas universidades que ya están bien...
Una de las mayores críticas es que se deja de lado al Este... que es donde más se necesita fondos...
Ángel, la página que me mandaste es una página del gobierno... y estas páginas quieren presentar el trabajo del gobierno como el non plus ultra y a Alemania, como la octava maravilla del mundo.
Ni tanto ni tan poco, diría yo.
Si te vas, por ej., a un diario conservador como el FAZ, te dirán que toda esta iniciativa de la "Excelencia" es una barbaridad... O sea, como decía mi papá: "todo depende del cristal con que se mire" :)
Gracias a ti estimado Juan José!
Lo que pienso que sería interesante es mirar cómo se puede mejorar las universidades :)
Muchísimos saludos!
Publicado por: marta salazar | 15 octubre 2009 en 03:41 p.m.
Puse el link para que supieras de qué estaba hablando, no porque estuviera de acuerdo concretamente con él; daba la impresión de que nunca habías oído hablar de todo eso y lo puse a modo de ejemplo; no me vas a pedir que haga un dossier.
El hecho es, Marta, que ya no sé qué querías decir, porque en cada entrada parece que defiendes cosas contrarias: si la política universitaria en Alemania te parece mal, podrías haberlo dicho desde el principio y me habría ahorrado explicaciones.
Si realmente no tienes una opinión formada sobre las Universidades alemanas, mejor que no digas nada.
Y por supuesto, si no sabes nada de las universidades españolas, con más motivo.
El término "condescenciente" en castellano suele tener un sentido negativo (y por si había dudas puse al lado 'patronizing', que es un término que usan mucho los anglosajones para lo mismo, es decir, 'hablar con un tono de superioridad moral').
Publicado por: Ángel Ruiz | 15 octubre 2009 en 05:51 p.m.
estimado Ángel, sorry por no entenderte en la totalidad de tus dichos, el problema está, sin duda, en mí; sin embargo, no te olvides que en la comunicación "el contenido del mensaje es decidido por el receptor" :)
yo prefiero preguntar si no entiendo algo ;)
"si la política universitaria en Alemania te parece mal, podrías haberlo dicho desde el principio y me habría ahorrado explicaciones",
estimadísimo: no hay una política mala o buena 100%, hay matices, diferencias -el don de diferenciar es muy importante y los univesitarios deberían cultivarlo siempre-
el pensamiento blanco y negro es propio de simplones, no te parece?
todo tiene pros y contras, ventajas y desventajas, puntos a favor y puntos en contra y la política universitaria de un país o de toda Europa, o el Proceso de Bolonia, también, o tú opinas que es totalmente malo o totalmente bueno?
yo creo que no :)
"Si realmente no tienes una opinión formada sobre las Universidades alemanas, mejor que no digas nada", bueno, yo circunscribí mi opinión a un punto muy preciso que no tiene relación alguna con el proyecto de la excelencia de la sra. Schavan ;)
a saber -copio mi mensaje inicial- "esta es la idea que existe y se practica en Alemania desde, por lo menos, la década del '60 o antes y... las universidades alemanas, en la lista denominada "National honours: most institutions in top 200" "
El pensamiento en blanco y negro... es propio de gente simple, lo que no se compadece con la profesión universitaria. Los universitarios distinguimos, diferenciamos, analizamos objetivamente y conversamos sobre distintos temas y sobre distintos ángulos, buscamos el contrapunto...
si los profesores universitarios no lo hacen, entonces no me extrana que las universidades estén mal...
saludos!
Publicado por: marta salazar | 17 octubre 2009 en 10:27 a.m.
http://histdeal.blogspot.com/2009/10/estudiante-en-universidad-espanola.html
no conozco las universidades espanolas, me ha tocado, eso sí, tener que defenderlas en más de una ocasión
saludos de día sábado!
Publicado por: marta salazar | 17 octubre 2009 en 10:30 a.m.
A ver, Marta, me paso varios comentarios intentando centrar la cuestión y lo que me acabo encontrando es una serie de quejas y cierto tono de argumentos 'ad hominem': ¡resulta que la culpa es mía por no explicarme bien! (y además demuestro con ello el poco nivel de los profesores universitarios y no sé si tengo que darme por aludido).
Y sí, el problema en gran parte está en ti: si a la primera no entiendes la palabra 'condescendiente' o los argumentos que se te dicen, es tu problema. Y eso de que "el contenido del mensaje es decidido por el receptor" es algo que tendrías que demostrar.
Por ejemplo, puedo sentirme molesto cuando me tratas con condescendencia (utilizo otra vez el verbo inglés 'patronize', por si sigues sin entender bien el término español 'condescendencia' -y te pongo un ejemplo: aquí te estoy tratando con condescendencia, para que te des cuenta de lo molesto que resulta-) explicándome que no todos los problemas son blanco y negro. Y sí que me parece que dividir los problemas en blanco y negro es algo propio de simplones (y además no me voy a dar por aludido, fíjate qué grandeza de miras tengo y qué amable soy).
Y te recomendaría que no usases los emoticones (esos dibujos hechos con signos que pretenden ser simpáticos pero que a mí más bien me molestan).
Y después de una serie de argumentos y quejas tan poco amables, agradecería que no pusieses ese 'Saludos': suena cínico.
Publicado por: Ángel Ruiz | 17 octubre 2009 en 11:28 a.m.